ODONTOPEDIATRÍA
Dra. Alejandra López Diego
¿CUÁNDO DEBEMOS HACER LA PRIMERA VISITA DE LOS NIÑOS AL DENTISTA?
Muchos son los padres que dudan sobre en qué momento hay que empezar a llevar a su hijo a la consulta del odontólogo. Según la AAPD (Asociación Americana de Odontopediatría) y la SEOP (Sociedad Española de Odontopediatría) la primera visita de los niños al dentista debería realizarse durante el primer año de vida del bebé, idealmente tras la erupción del primer diente (alrededor de los 6 meses de edad).
Muchos son los que se preguntarán, ¿es realmente necesario empezar con las visitas a una edad tan temprana? Pues bien, Por muy increíble que nos parezca, el 26% de los menores de 4 años en España tiene caries, por ello todos los expertos coinciden en recomendar que la higiene dental debe iniciarse incluso antes de que nazca el primer diente y la primera visita del niño al dentista, una vez haya cumplido el primer año de vida.
Antiguamente los especialistas recomendaban acudir a la primera revisión dental una vez aparecidos todos los dientes de leche o dentición temporal en el niño, pero el aumento de la caries en los pequeños ha hecho que cambie la edad en la que se recomienda visitar por primera vez al dentista.
Idealmente en esta primera visita no debería realizarse ningún tratamiento, muchos papás traen a sus hijos porque saben que ya tienen caries y nos preguntan, ¿por qué no empezamos hoy el tratamiento? Pues bien, porque el objetivo de esta primera visita es familiarizar al niño con el gaviete odontológico y que conozca a los profesionales que le van a tratar para así lograr disminuir su miedo y conseguir su confianza para lograr una buena colaboración a la hora de realizar los tratamientos.
Para
todos los escépticos que puedan creer que es muy temprano para llevar al niño
al dentista...

¿CUÁLES SON LAS VENTAJAS DE UNA PRIMERA VISITA AL DENTISTA A UNA EDAD TEMPRANA?
- Prevenir futuros problemas en la dentadura del niño.
- El gasto económico de la prevención es mucho menor que el de los tratamientos.
- Conseguir que vuestro hijo se acostumbre a ir al dentista, perdiendo esa fobia que tiene mucha gente.
- Enseñar al niño que el cuidado de los dientes es una cuestión muy importante que no debe descuidarse.
¿CADA CUÁNTO DEBEN IR LOS NIÑOS AL DENTISTA?
La frecuencia de las revisiones odontológicas será estipulada por el odontopediatra teniendo en cuenta las necesidades específicas de cada niño.
En principio, cada 6 meses deberían acudir a la consulta, en estas revisiones se valorará la higiene oral, como se desarrolla la dentición y la presencia de caries. Además, está indicado la realización de higienes dentales y la aplicación de barnices de flúor con el fin de prevenir la aparición de caries.
En ocasiones, en niños de alto riesgo de caries o que presentes condiciones especiales como pueden ser hipo mineralizaciones, antecedentes de traumatismos orales, alteraciones eruptivas etc. las visitas al odontopediatra deberán de realizarse con mayor frecuencia y será el especialista el que determine cuanto tiempo ha de pasar entre ellas.

¿CUÁNDO SALEN LOS PRIMEROS DIENTES DEL BEBÉ?
Una de las preguntas más frecuentes que nos hacen los papás cuando vienen con sus bebés a la clínica dental es, ¿Cuándo empiezan a salir los dientes de leche? ¿Cuándo debemos empezar a cepillar los dientes? ¿Se debe de usar pasta dental? ¿Cuánto tardan en caerse los dientes de leche y salir los definitivos?... en este artículo intentaremos solventar algunas de estas dudas tan frecuentes. ¡Empezamos!
ERUPCIÓN DE LA DENTICIÓN TEMPORAL (DIENTES DE LECHE)
En la mayoría de los bebés, los dientes temporales de leche empiezan a erupcionar alrededor de los 6 meses de edad, sin embargo, hay casos en los que el primer diente aparece de forma más precoz (sobre los 4 meses de vida) y otros en los que se retrasa incluso hasta cerca del primer año de vida.
El proceso de aparición de los dientes se realiza en tres períodos ininterrumpidamente, y que corresponden a la salida de distintos grupos dentarios de la siguiente manera:
En un primer grupo hacen erupción los centrales inferiores a los 6 meses, centrales, laterales superiores y finalmente, laterales inferiores. Una vez que han hecho aparición los incisivos hay un periodo de descanso en la salida dentaria de 4 a 6 meses.
En un segundo grupo aparecerán los primeros molares hacia los 16 meses y a los 20 meses los caninos.
Durante esta fase de desarrollo de la dentición primaria, la boca se prepara para el cambio de dieta líquida a sólida, y así queda lista para la erupción de las piezas posteriores.
En un tercer grupo aparecen los cuatro segundos molares, que tardan unos 4 meses.
Aproximadamente a los dos años y medio ya se debería haber completado la dentición primaria.
Se considera dentro de los límites normales, que la dentición primaria se encuentra completa en cualquier momento comprendido entre los 2 a 3 años de edad.
En general hay acuerdo en que los niños de un año de edad tengan seis a ocho dientes presentes y que la mayoría completan la primera entre los dos y medio y tres años.
Sin embargo, no deben ser motivo de preocupación aquellos en los que los dientes brotan algún tiempo después, siempre que estos sigan un orden normal en desarrollo.
A continuación, mostramos una imagen en la que
podemos ver la edad de erupción de cada uno de los dientes de leche.

¿CÓMO PUEDO SABER SI LE ESTÁN SALIENDO LOS DIENTES A MI BEBÉ? ¿QUÉ SÍNTOMAS PUEDE TENER?
La salida de los dientes produce dolor de encías en el bebé, por lo que es lógico que llore y se comporte con irritabilidad. Pero lo que realmente pone sobre la pista de la salida de los dientes es la salivación excesiva, el babeo constante que se produce por esta razón. Otro signo inequívoco es que lo muerde todo, hasta el punto de que se lleva continuamente las manos a la boca, incrementando así la generación de saliva.
Estos dos signos son suficientes para que los padres exploren las encías del bebé y comprueben si éstas están enrojecidas o inflamadas o si se puede apreciar un pequeño punto blanco y duro en la parte superior de la misma. Todo ello permitirá confirmar que se trata un diente que está erupcionando y va a salir.
Los signos y síntomas de la dentición pueden no ser las mismas en todos los bebés. Esto varía de un bebé a otro. Aunque las madres creen que el babeo a menudo está asociado y los bebés que pone los dedos en la boca ya que los síntomas de la dentición, estos síntomas pueden no ser necesariamente las de la dentición y puede ser sólo una parte del proceso de desarrollo normal y la coincidencia con la dentición. El signo específico de la dentición incluye:
- La erupción de los dientes en sí
- Inflamación de las encías
Los otros síntomas que se pueden ver durante la dentición y que a veces puede ser una mera coincidencia son:
- Babeo
- Aumento de morder
- Disminución del apetito
- Poner los dedos en la boca
- Frotar las encías
- Irritabilidad
- La falta de sueño
A los bebés les molestan más las encías por la noche por dos motivos: porque se trata de un dolor pulsátil (se agudiza con el latido cardíaco, que se nota más en posición horizontal) y porque por la noche los niños no están entretenidos y sí más cansados, factores que los llevan a centrarse en la zona que tienen más vulnerable.
Los síntomas pueden ser vistos cerca de 3-4 días antes de la erupción de los dientes y pueden persistir unos días después de que ha entrado en erupción. Estos no persisten durante semanas como se cree erróneamente. Estos síntomas pueden reaparecer cuando un nuevo diente entra en erupción.
La dentición puede ir acompañada de otros síntomas como fiebre de bajo grado. Aunque puede ocurrir fiebre baja durante la dentición la mayoría de las veces puede ser debido a otra causa y evaluación adecuado que se debe hacer. Del mismo modo la diarrea también se cree erróneamente que ser un síntoma de la dentición. La diarrea, aunque puede ocurrir durante la dentición no es un síntoma de la dentición, pero sólo una coincidencia. Alrededor de la misma época en que se ve la dentición, la coordinación mano boca se produce. Esto nos lleva a otro hito del desarrollo llamado pronunciando. El bebé comienza a poner en la boca lo que él / ella capaz de captar con las manos. Esto expone al bebé a los gérmenes que pueden provocar diarrea.
¿CÓMO ALIVIAR LAS MOLESTIAS DE LA ERUPCIÓN?
La erupción de los dientes de leche es un proceso delicado y duradero. Se trata de tener paciencia con el pequeño y observar que en efecto no se trata de nada más grave que la dentición.
Podemos ayudar a aliviar las molestias que siente el bebé durante este periodo de las siguientes formas:
MORDEDORES
Son, gracias a la presión que se ejerce sobre las encías al morderlos, el principal alivio a la dentición. Calman más aún cuando están fríos, por lo que es recomendable introducirlos un tiempo en la nevera antes de dárselos al bebé. Ponerlos en el congelador puede ser contraproducente, ya que el frío tan intenso los endurecería demasiado, y con su uso provocarían el mismo efecto en las encías del bebé. Si el mordedor está relleno de algún líquido, hay que asegurarse de que sólo es agua; otra sustancia podría ser perjudicial.
ALIMENTOS NO MUY CALIENTES
Hay que tener en cuenta que, por el dolor y la fricción de estar constantemente mordiendo objetos para aliviarse, las encías del bebé pueden estar especialmente sensibles durante este periodo.
MASAJEAR LA ZONA
Podemos contribuir a aliviar las molestias de la dentición dando un suave masaje en las encías del bebé con la punta del dedo envuelta en una gasa estéril. Si el niño tiene más de seis meses podremos acompañar el masaje con algún gel farmacológico indicado para ello.
HIGIENE
Es importante mantener la barbilla y cara del bebé siempre secas, pues la humedad de la saliva en la zona podría provocar la salida de un sarpullido.
MEDICAMENTOS
Para una ayuda extra, siempre se podrá acudir a la farmacia a por algún tratamiento recomendado para las molestias de la erupción dental. Como remedio homeopático contamos con preparados como el Chamodent o fármacos como el paracetamol o el ibuprofeno.
¿CUÁNDO EMPEZAMOS CON EL CEPILLADO DE LOS DIENTES DEL BEBÉ?
En cuanto a la higiene oral de los más bebés recomendamos
empezar con la estimulación de las encías alrededor de los 4 meses, para ello
podemos utilizar una gasita mojada en agua o bien un dedal de silicona.
En cuanto empiecen a erupcionar los primeros dientes temporales se recomienda utilizar un cepillo dental adecuado a la edad del bebé y pasta dental de 1000 ppm en cantidad raspado para proteger contra la caries dental. Mientras solo hayan erupcionado los incisivos podemos seguir utilizando el dedil, pero cuando erupcionen los molares hay que cambiar al cepillo para asegurarse que realizamos una buena limpieza. El cepillado ha de ser rápido y efectivo y se deben de limpiar las tres caras del diente. Desde la erupción del primer diente hasta los 3 años se recomienda aplicar pasta dental de 1000 ppm en cantidad raspado y utilizar el cepillo en seco, es decir, no mojarlo en agua para evitar que se cree una cantidad excesiva de espuma y reducir así la probabilidad de que el niño pueda tragar la pasta. En los cepillos dentales suele haber una franja de otro color que nos indica cual es la cantidad de pasta que hay que aplicar. Después del cepillado podemos retirar los restos de pasta que queden en la boca mientras el niño no sepa escupir. Debemos de tener en cuenta que a muchos bebés no les gusta el momento del cepillado y es probable que llore. El cepillado debe de ser realizado por los padres a la mañana y a la noche hasta los 8 años.

7 FACTORES EN LA APARICIÓN DE CARIES EN NIÑOS
Cada vez son más y más pequeños los pacientes que acuden a nuestra consulta con caries dental, la caries en niños se ha convertido en la enfermedad infecciosa crónica más frecuente en la infancia, cinco veces más común que el asma y siete que la rinitis alérgica, a pesar de ser potencialmente, controlable y prevenible, sigue siendo una enfermedad muy común y universal.
La caries dental
pertenece al grupo de enfermedades consideradas multifactoriales es decir que
existen varios factores en la aparición de caries en niños, a
continuación, vamos a nombrarlos y hablar sobre ellos:
1.La Falta de Higiene oral es el factor clave para la aparición de la caries en niños, se deben cepillar los dientes desde que aparece el primer diente en la boca de nuestro hijo, teniendo en cuenta que el cuidado oral es responsabilidad nuestra hasta que el niño tenga entre 8-10 años. También se deberá pasar el hilo dental cuando las muelas tengan contacto.
2. Dieta altamente cariogénica, cualquier azúcar
consumido con frecuencia puede ocasionar la caries. Se desaconseja los azúcares
entre comidas y los alimentos de consistencia pegajosa. Mientras mayor sea la
frecuencia del» picoteo» o bebidas entre horas, mayor riesgo de caries. Debemos
de tener especial cuidado con los azúcares ocultos (leche chocolateada,
galletas, bollería, zumos industriales, pan de molde, patatas fritas
embolsadas, refrescos de cola...) por ello se aconseja evitar toda fuente de
azúcar refinado durante los primeros años de vida

5. Visitas tardías al dentista, mientras más
pronto visites al odontopediatra (antes del año de vida), mayores herramientas tendrás para
prevenir las caries en niños.
6. Insuficiente uso del flúor; el uso tópico ha
resultado muy eficaz para evitar el ataque de las bacterias, es importante, que
el odontopediatra indique la cantidad de flúor de acuerdo con la edad y el
riesgo individual de tu hijo.
7. Hay un pequeño grupo de niños que
presentan defectos en el esmalte llamados
hipoplasias cuyas superficies son más susceptibles a caries.
Por todo esto,
es importante visitar al odontopediatra lo antes posible, para que pueda
valorar el riesgo de caries de su hijo y poder explicarle de forma
individualizada todos los factores de riesgo que presenta.

Beneficios de la lactancia materna
Los expertos dicen que amamantar al bebé es bueno para usted y para él. Si amamanta por algún tiempo, no importa lo breve que sea, usted y su bebé se beneficiarán de la lactancia materna.
Aprenda respecto a la lactancia materna y decida si amamantar es para usted. Sepa que amamantar lleva tiempo y práctica. Consiga ayuda de su familia, enfermeras, especialistas en lactancia o grupos de apoyo para tener éxito con la lactancia materna.
La lactancia materna es buena para su bebé
La leche materna es la fuente de alimento natural para los bebés menores de 1 año. Esta leche:
- Tiene las cantidades adecuadas de carbohidratos, proteínas y grasa
- Proporciona las proteínas digestivas, minerales, vitaminas y hormonas que los bebés necesitan
- Tiene anticuerpos que ayudan a evitar que su bebé se enferme
Su bebé amamantado es menos propenso a enfermarse
Su bebé tendrá menos:
- Alergias
- Infecciones del oído
- Gases, diarrea y estreñimiento
- Enfermedades de la piel (tales como eccema)
- Infecciones estomacales o intestinales
- Problemas de sibilancias
- Enfermedades respiratorias, como la neumonía y la bronquiolitis
El bebé alimentado con leche materna puede tener un menor riesgo de padecer:
- Diabetes
- Obesidad o problemas de peso
- Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)
- Caries en los dientes
La lactancia materna también es buena para usted
- Establecerá un vínculo único entre usted y su bebé
- Descubrirá que es más fácil bajar de peso
- Demorará el inicio de sus periodos menstruales
- Disminuirá el riesgo de enfermedades, como diabetes tipo 2, ciertos tipos de cáncer de ovarios y de mama, osteoporosis, enfermedades del corazón y obesidad
Amamantar puede ahorrarle tiempo y dinero
Usted puede:
- Ahorrar cerca de $ 1,000 por año cuando no compra leche maternizada
- Evitar la limpieza de biberones (teteros)
- Evitar el hecho de tener que preparar la leche maternizada (la leche materna está siempre disponible a la temperatura adecuada)
Consiga ayuda si su bebé o usted tiene necesidades especiales
Sepa que la mayoría de los bebés, incluso los prematuros, pueden amamantarse. Hable con un especialista en lactancia para obtener ayuda con la lactancia.
Algunos bebés pueden tener problemas para amamantar a causa de:
- Defectos congénitos de la boca (labio leporino o paladar hendido)
- Problemas para succionar
- Problemas digestivos
- Nacimiento prematuro
- Tamaño pequeño
- Condición física débil
Es posible que tenga problemas para amamantar si tiene:
- Cáncer de mama u otro cáncer
- Infección o absceso mamario
- Producción deficiente de leche (poco común)
- Cirugía previa o radioterapia
La lactancia materna no se recomienda para las madres que tengan:
- Llagas de herpes activo en las mamas
- Tuberculosis activa no tratada
- Infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) o sida
- Inflamación en el riñón
- Enfermedades graves (como enfermedad cardíaca o cáncer)
- Desnutrición grave
